domingo, 15 de abril de 2012

San Cristóbal de la Vega

San Cristóbal al atardecer.
  Se encuentra esta localidad en la parte más occidental de la provincia, cerca de los límites con tierras abulenses y vallisoletanas, a algo menos de 60 km de la capital. Su emplazamiento en la llanura castellana explica una economía basada fundamen-talmente en la agricultura, aquí enriquecida por la tradicional producción vinícola, de la aún se con-servan bodegas en uso; por otra parte está situada a pie de la ruta, actual N-601, que lleva a Valladolid y hacia el Norte peninsular, por lo que la villa fue parada obligada de arrieros y trajinantes dada su estratégica situación en las antiguas rutas de carretería.
  La segunda parte de su topónimo, añadido en época moderna, manifiesta su pertenencia al tercio de La Vega, el cual se incluía en el arcedianato de Arévalo. Fueron estas tierras repobladas por Alfonso VI, según recoge el obispo don Pelayo, en su obra datable en torno a 1.120. Barrios García a partir  del estudio de la toponimia propone que posiblemente este núcleo fue uno de aquellos en que se asentaron gentes venidas de Cinco Villas; señala además que en 1.090 ya debía contar este arcedianato con una cierta estructura, puesto que en esta fecha pasa a estar bajo jurisdicción de la mitra palentina, situación que se mantuvo alrededor de unos cincuenta años.
  Su parroquia, Sant Christoual, aparece citada en el documento redactado por el cardenal Gil de Torres, allá por el año 1.250, en el elenco de todas las pertenecientes a la diócesis abulense y con fines fiscales , la cantidad que debían aportar , XXX morabetinos, indica que se trataba de una comunidad ya establecida y de tamaño medio. Aparece en otro documento poco tiempo después, 1.291, que trataba de las pesquisas realizadas para averiguar si se estaban cobrando procuraciones en la diócesis de Ávila. Posteriormente con la reforma de la estructura de la diócesis y los arcedianatos, San Cristóbal se constituyó lugar de reunión  del Sexmo de la Vega.
  Hasta 1.883, con la organización provincial elaborada por Javier de Burgos, perteneció a la provincia de Ávila, como otras localidades de su entorno, pasando después a incluirse en la segoviana; esta circustancia tuvo también reflejo en el orden eclesiástico, trocando también su jurisdicción. En la actualidad pertenece al partido judicial de Santa María de Nieva y es una de las localidades más castigadas por el problema de la despoblación y el envejecimiento.


Arquitectura popular:







 Iglesia parroquial de San Cristóbal Mártir:
Iglesia parroquial San Cristóbal Mártir.
 Se sitúa este templo en la parte occidental de la población, se instala sobre un alto de relieve irregular horadado de bodega y desde el cual domina sobre el caserío del pueblo y desde el que se da vista a gran parte de lo que fue el tercio de La Vega, de la comunidad de Arévalo. Está aislado del caserío, sin construcciones adosadas y con presencia de un cementerio a los pies. Se ve claramente que fue un edificio románico-mudejar.  En cuanto a su datación, se trata de un edificio cuya fábrica primigenia debe corresponder a la segunda mitad del S.XII. Se trata de una iglesia de reducidas dimensiones, aspecto achaparrado y un tanto desmejorado, gran parte de su exterior se encuentra en mayor o en menor medida enfoscado pobremente lo cual no ayuda ni a embellecer el templo ni a sacar datos fieles de su construcción. Así el muro septentrional nada enseña más que el recuerdo de una portada que parece de cañón corto, medio punto y alfiz y una cornisa de arquillos, sin duda posterior del momento que aquí se trata y del tipo que Ruiz Hernando  fecha en torno al S.XV.

Ábside enfoscado.
Fachada Norte. Portada cegada y
arquillos en la cornisa.
Ábside, detalle.  
   A continuación, en dirección al ábside, aparece un tramo recto compuesto de cajones de mampostería y refuerzo de ladrillos en la esquina para dar paso al tramo curvo; éste único ábside se compone de un basamento del que arrancan series de arquerías de ladrillo, hoy sólo visibles en parte, y remate superior de mampostería entre lo que pudieran ser unos cajones de ladrillo pero tal es su situación que afirmar tajantemente sería de lo más aventurado. La cabecera por tanto abre el camino de las hipótesis entre las cuales no sería la más descabellada plantear un recrecimiento posterior a partir de la cornisa que se supone  sobre las series de arquerías. Éstas se componen de arcos doblados de medio punto y cañón estilizado , con intradós llamativamente rehundido.

Series de arquerías.
Torre a los pies del templo.
Campanario.




  
  La torre se sitúa a los pies y es muestra de la evolución general del edificio, presentando un perfil ataluzado, propio de intervenciones de refuerzo, en su interior, una escalera de caracol facilita el acceso al cuerpo de campanas. Esta idea de edificio reforzado se vuelve a encontrar en el interior del templo, el cual presenta dos naves, aunque se piensa que pudieron ser tres, una de ellas llamativamente más ancha ejerciendo de nave central, cubiertas de yeserías que contribuyen a darle un aspecto renovado en épocas posteriores a su fábrica original. 

Nave lateral.
Nave central.

Vista del interior del templo.



  En el presbiterio del templo veremos un pequeño retablo barroco donde se entroniza san Cristóbal patrón del pueblo, santo que fue muy popular en plena Edad Media y que sufrió martirio en tiempos del emperador romano Decio. Junto a él también veremos un cuadro con un Santiago Matamoros.


Retablo Mayor.
Cuadro con Santiago
Matamoros.
Talla de San Cristóbal.



  
  Únicamente el primer tramo de arquería en el lado septentrional, parece de la construcción original, componiéndose de un arco doblado de ligerísimo apuntamiento, sobre un pilar de ladrillo compuesto de pilastras de perfil escalonado, que recuerda a los aperos de Montejo de Arévalo, en su parte accidental y sobre una columna de ancho fuste en la parte contraria. Son estos añadidos los que insisten en la idea de templo reforzado. Otra columna adosada al muro meridional, un contrafuerte próximo a ella, engrosamientos de la torre..., todo parece indicar que nos encontramos ante una estructura inestable, quizá motivado por lo escarpado del terreno, quizás por la presencia próxima de bodegas subterráneas. 
  Misteriosos son los arcos de medio punto presentes en la tribuna del coro, doblados, de medio punto pero distinto radio uno de otro, parecen pertenecer al templo original, aunque su lectura actual resulta oscura.


Tribuna.
Vista de la iglesia y las bodegas.
Entrada de una bodega.
A la derecha de la foto, sobre la tribuna, arquería doblada apuntada que puede
pertenecer a la fábrica original mudéjar. Este arco parte de la columna que se
puede ver detrás con pilastras escalonadas de ladrillo. A la izquierda la columna
de refuerzo adosada al muro. Al fondo detrás de la tribuna, los dos arcos de
distinto tamaño que también posiblemente pertenecen a la edificación primigenia.


Textos: Románico Digital y apuntes de diferentes webs.


Más fotos: