San Vicente de Arévalo

San Vicente de Arévalo.

  Madoz describe este pueblo a mediados del siglo XIX de la siguiente forma:
  "Su clima es frío, padeciéndose por lo común, calenturas intermitentes, costipados y dolores de costado. Tiene 26 casas de un solo piso, una plaza pequeña, casa de ayuntamiento que sirve a la par de cárcel; escuela de primeras letras común a ambos sexos, dotada con 370 reales. Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. A media legua al Este del pueblo, y en el centro de los pinares, hay una ermosa ermita del Smo. Cristo que lleva el sobrenombre de éstos árboles; en la que se celebra su festividad el 14 de Septiembre con romería y mucha concurrencia de los pueblos cercanos. 35 vecinos; 137 almas".
  En San Vicente de Arévalo hay algunas edificaciones con cierta solera en la Plaza de la Taberna y en áreas de corrales de adobe en la Calle Pedro Rodríguez y Calle Calzada de Arévalo.

  Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
  Su iglesia data de la primera mitad del S.XVI aunque buena parte de los añadidos y reformas realizadas en la cabecera y en otras zonas, son del S.XVIII. A la primera fábrica corresponde la torre, la estructura de sus naves y su cabecera. A la segunda fase sus bóvedas de yeserías barrocas y la mayor parte de los bienes muebles, entre los que hay que destacar el del presbiterio, ejecutado ya muy avanzado el SXVIII.

  El templo es de tres naves separadas por formeros, con un único ábside, se accede al interior a través de un pequeño pórtico formado por cuatro sencillas columnas de granito. La techumbre es una armadura de madera sin talla.

Templo de tres naves.

Armadura de madera sin talla.

Nave central

 La tribuna emplazada como es habitual a los pies del templo es un alfarje de jaldetas lisas en estribado y su viga frontal es el único elemento que recibe ornamentación, basada en recuadros de uñas y talla de "servilletas", lo que ha permitido fecharla en los últimos años del S.XVI o principios del S.XVII.

Tribuna a los pies del templo.

Viga frontal decorada de la tribuna.

Alfarje de jaldetas.

Recuadros de uñas y talla de "servilletas" en la viga frontal.

  La torre está situada a los pies del templo es de planta cuadrada y está construida en ladrillo. Su interior se organiza en tres plantas, los ejes de las bóvedas que cubren estas cámaras se van cruzando. El acceso de la inferior se forma por un arco conopial de ladrillo. La escalera de caracol. Se remata con almenado, siendo sólo original el arranque. En cada uno de los paños se abren dos vanos, alguno ultracircular.
  Debió terminar en terraza, pues en el piso que corresponde al cuerpo de campanas se conservan las trompas de arranque de una cubierta, que quizá se suprimió al realzar el remate octogonal del cuerpo superior posiblemente en época barroca. Cronológicamente puede fecharse en la primera mitad del S.XVI, en los mismos años en los que se levantó la iglesia.

Remate octogonal de la torre.

Escalera de caracol.

Cuerpo de campanas.

  El retablo Mayor se estructura en tres calles, banco y ático. Es de finales del S.XVIII y está presidido por una imagen de la Asunción. Como obra más significativa, citamos un Cristo del S.XVI colocado en un retablo de pequeñas dimensiones cuya datación es bastante posterior.

Retablo Mayor.

Retablo barroco.

Cristo del S.XVI.

  Ermita del Cristo de los pinares

Talla románica del Cristo de los Pinares.

  Aunque la ermita debió existir bastante antes, el edificio actual responde a modos constructivos de finales del S.XVII. Cuenta con tres naves y una sola cabecera. La portada principal de acceso aparece culminada superiormente por una espadaña que presenta decoración de bolas de piedra.
  En el interior hay cuatro retablos del S.XVIII, entre ellos el Mayor con un Cristo central. Pero ésta no es la famosa imagen del Cristo de los Pinares ya que ésta se sitúa en un retablo que localizamos en la nave izquierda. Se trata de una talla románica del S.XII, siendo uno de los cristos más antiguos de la provincia. Presenta una anatomía bastante cuidada aunque se le ha colocado una larga peluca de pelo natural que en parte lo desfigura. En 1.998 el artista Andrés Rueda realizó un par de murales al óleo que están situados en uno de los laterales. En ellos se representa la Ascensión de la Virgen y la Procesión de San Lázaro con fondos paisajísticos de la llanura y pinares característicos de la zona. Toda iniciativa cuya finalidad sea embellecer los templos con nuevas propuestas debe ser aplaudida.


  Francisco Gutierrez:

  Francisco Gutierrez (1.724-1.782) nació en esta localidad. ¿y quién fue este personaje? Pues un afamado escultor que realizó, entre otras obras, la mismísima Cibeles madrileña. Parte de esta escultura hubo de ser rematada por otros artistas ya que la muerte le sorprendió al abulense antes de finalizar el trabajo.

Fuente de Cibeles en Madrid, obra de Francisco Gutierrez, nacido en San Vicente de Arévalo.

Textos: Jorge Díaz de la Torre en "Un reino de adobe y ladrillo" y María Isabel López Fernández en "La arquitectura mudéjar en Ávila".
Reportaje de Cachero "El regreso del Cristo de los Pinares".
http://lalugareja.blogspot.com.es/2012/10/el-regreso-del-cristo-de-los-pinares.html


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